viernes, 19 de noviembre de 2010

Pablo Gutiérrez, Premio Ojo Crítico de Narrativa 2010



El Premio Ojo Crítico de Narrativa ha recaído en el escritor y profesor Pablo Gutiérrez.
El jurado le ha premiado “por su potencia narrativa, su capacidad de mezclar situaciones dramáticas con el sentido del humor y su habilidad para retratar el mundo adolescente de forma lírica y descarnada”.
Además ha alabado una de sus obras, la novela Nada es crucial que “conjuga la precisión y la belleza literaria necesarias para atrapar al lector”.

El jurado de este galardón ha estado formado por Nuria Azancot, redactora jefe del suplemento El Cultural del diario El Mundo; Peio H. Riaño, escritor y redactor del área de cultura de Público; Inés Martín Rodrigo, redactora del área de cultura del diario ABC; Juan Vilá, crítico literario del suplemento On Madrid; Modesta Cruz, redactora especializado en literatura del área de cultura de RNE y los directores del programa El Ojo Crítico, Laura Barrachina y Julio Valverde.

El joven escritor andaluz (Huelva, 1978) trabaja actualmente como profesor de literatura en un instituto de Cádiz.
Además de Nada es crucial, de su mano han salido otros grandes relatos como Rosas, restos de alas (La Fábrica), que fue su primera novela publicada y que obtuvo el Premio Tormenta en un Vaso al mejor nuevo autor en castellano.
Gutiérrez ha sido elegido además por la revista británica Granta para participar en una edición especial que reúne a los 22 mejores autores jóvenes en español.
Otra de sus publicaciones es Carne de cerdo, obra de teatro que le valió el puesto de finalista del Premio Miguel Romero Esteo de dramaturgia.

Un testimonio amargo y duro, levantado con humor inteligente y poderosa imaginación.
Pablo Gutiérrez se merece que el buen aficionado a la literatura preste atención a su obra.
Santos Sánz Villanueva (El Cultural)

Inteligente y brutal, ágil y en ocasiones de un brillo deslumbrador.
Fernando Castanedo, (Babelia, El País)

Amarga y bella al mismo tiempo. Dispara palabras que se convierten al tocar nuestra piel en emociones.
Laura Barranchina, (RNE, El ojo crítico)